Las unidades de control interno, auditoría interna o entidades similares juegan un papel fundamental en el sistema de control interno de una entidad. Estas unidades son responsables de medir la eficiencia, eficacia y economía de los diferentes controles, asesorando a la Alta Dirección en la continuidad del proceso administrativo, evaluando los planes establecidos y sugiriendo correcciones para alcanzar los objetivos previstos.
Unidades de Control Interno y Auditoría Interna: Aspectos Generales y Funciones.
Su función principal es ser el «control de controles», evaluando la efectividad del sistema de control en la entidad para ayudar a la Alta Dirección en la toma de decisiones que conduzcan al cumplimiento de los objetivos estatales.
El diseño, implementación y mantenimiento del sistema de control interno, así como la ejecución de los controles establecidos, recae en el representante legal y los líderes de los diferentes procesos de la entidad. Las unidades de control interno y auditoría interna se encargan de medir y evaluar la eficiencia, eficacia y economía de estos controles, asesorando en la continuidad administrativa y proponiendo correcciones necesarias para lograr los objetivos.
Modelos internacionales como COSO definen la función del auditor interno, señalando que desempeña un papel crucial en la evaluación de la eficacia de los sistemas de control interno y brinda supervisión debido a su rango y autoridad organizacional.
La meta de estas unidades es proporcionar seguridad razonable sobre el adecuado diseño y funcionamiento de los controles, favoreciendo la consecución eficiente de los objetivos institucionales.
Relación estratégica y administrativa del jefe de la unidad de control interno, auditoría interna o quien haga sus veces.
El jefe de las unidades de control interno o el equivalente debe establecer una relación tanto administrativa como estratégica con su nominador (quien lo nombra) y con el representante legal de la entidad donde trabaja.
En cuanto a la relación administrativa, el jefe debe desempeñar sus funciones con diligencia, eficiencia e imparcialidad, siguiendo las políticas de operación establecidas por la entidad. Aunque tiene independencia en su labor, debe recordar que su ámbito de acción está circunscrito a la entidad a la cual está vinculado. Es importante mantener una relación armoniosa y de respeto con el representante legal y su equipo directivo, cumpliendo con las políticas, procedimientos y otros mecanismos de gestión establecidos.
En cuanto a la relación estratégica, es crucial establecer canales de comunicación con el nominador y el representante legal para recibir y transmitir información necesaria para el cumplimiento de sus funciones.
Funciones de las unidades de control interno
Las unidades de control interno, auditoría interna o equivalentes buscan agregar valor a la gestión de la entidad y mejorar sus operaciones. Proporcionan información real sobre el estado de la organización en un periodo determinado, con el fin de orientar estrategias y acciones para alcanzar los objetivos institucionales.
Para cumplir su propósito, estas unidades deben mantener una actitud dinámica e innovadora, aumentando su competencia técnica para mejorar la efectividad de su labor y, por ende, la gestión institucional.
En el ejercicio de su evaluación independiente, deben seguir las normas internacionales de auditoría interna y utilizar indicadores de desempeño, informes de gestión y tecnología para verificar y evaluar el control interno de la entidad de manera eficiente y segura.
En resumen, las unidades de control interno y auditoría interna cumplen un rol esencial en garantizar la efectividad del sistema de control en las entidades, brindando asesoramiento y supervisión para lograr los objetivos institucionales. Su relación con la dirección y su enfoque en la mejora continua son fundamentales para su éxito en el ámbito de la gestión pública y privada.